Satisfacer las necesidades presentes de la sociedad, sin comprometer los recursos de las generaciones posteriores y que las soluciones aportadas, puedan continuar siendo aplicables de manera indefinida en el tiempo.
El diseño de las tecnologías verdes debe tener en cuenta todo el proceso de la vida útil del producto creado, de la cuna a la tumba, como se dice en la jerga científica, de forma que sea completamente recuperado o reutilizado.
Los productos de la tecnología verde deben tender a que haya un cambio en el consumo, que apunte a la reducción de los desperdicios, del consumo energético y de la contaminación. Además, estas reducciones deben ser parte de la premisa de creación, producción, transporte y destino final. Innovación Desarrollar elementos, materiales o prácticas, que sean originales y novedosas o darle nuevos usos a las que ya existen, siempre teniendo como objetivo principal, el beneficio del ser humano sin que ello vaya en detrimento de el del Medio Ambiente.
Los productos de las tecnologías verdes deben ser capaces de introducirse en el medio económico, acelerando su implementación con metodologías adecuadas y buscando que sus beneficios no solo sean de índole monetaria, sino que no tengan efectos dañinos secundarios